Shema Israel Communities, is a network of Communities (synagogues) of messianic conviction, established in several in some States of the USA, and in some cities of some countries such as USA, Mexico, Guatemala, Costa Rica, Colombia , Brazil, and in Spain, in the city of Malaga; The Shema Israel Synagogues are established with a vision to house the Bney Anusim and those who identify with Israel and the Jewish People. Each community is deeply identified with the Jewish Messiah Yeshua haMashiach and the Apostolic Writings; A network of congregations observing the Torah, the Feasts of the Eternal and of course the Shabath and the Kasherut.
ParashĂĄ 43 Masei
NĂşmeros 33:1 â 36:13
Por Dr. K. Blad Š
Segunda edicion 2013-14 (5774
Prohibida toda reproduccion lucrativa
AliyĂĄs de la TorĂĄ (cuando Masei es leĂda por separado):
33:1-10
33:11-49
33:50 â 34:15
34:16-29
35:1-8
35:9-34
36:1-13
Maftir: 36:10-13
HaftarĂĄ:Â JeremĂas 2:4-2:28; 4:1-2
Masei
Masei es la forma plural posesiva de masĂĄÂ que significa âsalidaâ, âpunto de partidaâ, âviajeâ, âmarchaâ, âestaciĂłnâ. Implica no sĂłlo los lugares donde acamparon los hijos de Israel, sino tambiĂŠn las jornadas que se hicieron entre esos lugares.
Primera aliyĂĄ, 33:1-10
33:2Â Â âY MoshĂŠ anotĂł los puntos de partida segĂşn sus jornadas, por el mandamiento de HaShem, y estas son sus jornadas, conforme a sus puntos de partida.â (LBLA revisada)Â â MoshĂŠ anotĂł los 42 (7×6) viajes que los hijos de Israel hicieron en la estepa. Hay varios propĂłsitos por los cuales estos lugares fueron escritos:
Fueron escritos para mostrar a la posteridad que la salida de Egipto de millones de personas no es un cuento. Hay datos especĂficos de lugares y sucesos, que muestran que realmente estuvieron allĂ. La mayorĂa de los desiertos descritos en este relato eran completamente inhabitables porque allĂ no habĂa ni agua ni vida vegetal. Una gran poblaciĂłn de hombres, mujeres y niĂąos jamĂĄs hubieran podido sobrevivir de manera natural. SĂłlo la intervenciĂłn divina podĂa sostenerlos en aquellos lugares inhabitables.
Fueron escritos para dar a conocer la bondad del Eterno en medio de una sentencia de tener que dar vueltas durante 40 aĂąos en el desierto. En 40 aĂąos sĂłlo hubo 42 viajes. AsĂ que no estuvieron vagando de un lado para otro todo el tiempo, sino que en varios lugares se quedaron acampados durante mucho tiempo. RashĂ menciona que sĂłlo hubo 20 viajes en 38 aĂąos, porque se hicieron 14 viajes durante el primer aĂąo, y ocho viajes despuĂŠs de la muerte de AharĂłn en el cuadragĂŠsimo aĂąo. AdemĂĄs estuvieron en Kadesh durante 19 aĂąos. Durante el resto del tiempo estuvieron en 19 campamentos durante 19 aĂąos, que corresponde a un promedio de un viaje por aĂąo.
Fueron escritos para que los hijos de Israel supieran que sus peregrinajes fueron dictados por un plan espiritual definido.[1]
Fueron escritos para que nos acordemos del viaje en el desierto. Cuando estamos viviendo en la prosperidad hay que recordar los momentos difĂciles que nos han llevado hasta allĂ. AsĂ nos mantendremos humildes y agradecidos. Si no hubiera sido por el sostenimiento mediante la gracia del Eterno, nunca hubiĂŠramos podido llegar a donde estamos en estos momentos.
Fueron escritos para revelar que en el destino final del viaje nĂşmero 33 hay un secreto mesiĂĄnico.
33:3 âEl mes primero partieron de RamsĂŠs el dĂa quince del mes primero; el dĂa despuĂŠs de Pesaj, los hijos de Israel marcharon con mano poderosa a la vista de todos los egipcios.â (LBLA revisada) â El 15 de aviv/nisĂĄn empezaron su viaje. EstĂĄ escrito que fue el dĂa despuĂŠs de pesaj. Esto nos enseĂąa que la salida de Egipto fue en la madrugada del dĂa 15 del primer mes, cf. Deuteronomio 16:1.
La palabra pesaj hace referencia al sacrificio del cordero que fue hecho durante la tarde anterior, es decir, el 14 de aviv alrededor de las 15 horas (3 PM).
Hoy en dĂa, en Israel, el 15 de nisĂĄn es llamado el primer dĂa de pesaj, pero la TorĂĄ ubica pesaj en el dĂa 14 de NisĂĄn, en relaciĂłn con el sacrificio del cordero.
33:6  âPartieron de Sucot y acamparon en Etam, que estĂĄ en el extremo del desierto.â (LBLA revisada) â Sucot es la primera parada despuĂŠs de la salida de RamsĂŠs. Esto nos enseĂąa que va a haber una celebraciĂłn de sucot justamente despuĂŠs de la segunda venida del MesĂas cuando todos los hijos de Israel y las naciones que son de YeshĂşa van a ser trasladados en el aire a la Tierra de Israel. Sucot serĂĄ la celebraciĂłn de las bodas del Cordero inmediatamente despuĂŠs del segundo ĂŠxodo, que es la redenciĂłn final.
33:7 âPartieron de Etam, se volvieron a Pi-HaHirot, frente a Baal-TsefĂłn, y acamparon delante de Migdol.â (LBLA revisada)Â â Parece que Baal-TsefĂłn fue un lugar que estaba al otro lado del Mar de CaĂąas, (Mar Rojo). Cuando habla de que volvieron, significa que no siguieron por el camino normal recto hacia el oriente, sino que giraron hacia el sur y llegaron a Pi-HaHirot, que estaba junto al golfo de Aqaba.
Segunda aliyĂĄ, 33:11-49
33:13 âPartieron de DofkĂĄ y acamparon en Alush.â (LBLA revisada)Â â En Alush recibieron el manĂĄ por primera vez.
33:14 âPartieron de Alush y acamparon en Refidim; allĂ fue donde el pueblo no tuvo agua para beber.â (LBLA revisada)Â â En Refidim fueron atacados por Amalek.
33:15 âPartieron de Refidim y acamparon en el desierto de SinĂĄi.â (LBLA revisada)Â â En SinĂĄi entraron en el pacto con HaShem y recibieron la TorĂĄ.
33:16 âPartieron del desierto de SinĂĄi y acamparon en Kivrot-HaTaavĂĄ.â (LBLA revisada)Â â Kivrot-HaTaavĂĄ significa âtumbas de la codiciaâ, porque allĂ sepultaron a los que habĂan sido codiciosos, cf. NĂşmeros 11:34.
33:18 âPartieron de Jatserot y acamparon en RitmĂĄ.â (LBLA revisada)Â â Desde RitmĂĄ fueron enviados los doce espĂas o exploradores.
33:22 âPartieron de RisĂĄ y acamparon en Kehelata.â (LBLA revisada)Â â En Kehelata se rebelĂł el grupo de KĂłraj.
33:23 âPartieron de Kehelata y acamparon en el monte Shefer.â (LBLA revisada)Â â SegĂşn el Targum Yonatan, el monte Shefer era una montaĂąa con frutos hermosos.
33:36 âPartieron de EtsiĂłn-Guever y acamparon en el desierto de Tsin, esto es, Kadesh.â (LBLA revisada)Â â Se quedaron 19 aĂąos en el desierto de Tsin, que es Kadesh. AllĂ muriĂł Miryam. Kadesh significa âsantificadoâ. SegĂşn el TargĂşm YonatĂĄn, el Nombre del Eterno fue santificado aquĂ cuando Ăl decretĂł que MoshĂŠ y AharĂłn no podĂan entrar en la Tierra.
33:37-39 âPartieron de Kadesh y acamparon en el monte Hor, al extremo de la tierra de Edom. Entonces el sacerdote AharĂłn subiĂł al monte Hor por mandato de HaShem, y allĂ muriĂł, el aĂąo cuarenta despuĂŠs que los hijos de Israel habĂan salido de la tierra de Egipto, el primer dĂa del mes quinto. AharĂłn tenĂa ciento veintitrĂŠs aĂąos de edad cuando muriĂł en el monte Hor.â (LBLA revisada)Â â El monte Hor estĂĄ situado al lado oriental del valle de ArabĂĄ. Es la montaĂąa de piedra areniza mĂĄs alta de Edom, al lado oriental de la vieja ciudad de Petra. Hor significa âmontaĂąaâ. Hay un lugar que tradicionalmente es reconocido como la tumba de AharĂłn, en un monte en el sur de Jordania, cerca de Petra.
33:42 âPartieron de TsalmonĂĄ y acamparon en PunĂłn.â (LBLA revisada)Â â En PunĂłn, los hijos de Israel se quejaron por el manĂĄ y por eso vinieron las serpientes.
33:49 âY acamparon junto al YardĂŠn, desde Bet-Yeshimot hasta Avel-Shitim, en las llanuras de Moav.â (LBLA revisada) â AllĂ murieron 24 000 israelitas por el pecado de Baal-Peor. AquĂ estĂĄ escrito que el campamento se extendĂa desde Bet-HaYeshimot hasta Avel-Shitim, lo cual puede darnos una idea de su tamaĂąo. El Talmud[2] relata como RabĂĄ bar JanĂĄ dijo que habĂa visto ese lugar (desde Bet-Yeshimot hasta Avel-Shitim) y que mide tres parsaot por tres parsaot. Una parsĂĄÂ Â (en plural parsaot) mide 4 mil. RashĂ menciona que el campamento de los hijos de Israel medĂa 12 mil, (un mil corresponde a 1 080 metros). Esto significa que se trata de un total de unos 13 kilĂłmetros de ancho y 13 kilĂłmetros de largo, lo cual equivale a 168 km2, o 16 800 hectĂĄreas.
Tercera aliyĂĄ, 33:50 â 34:15
33:52 âexpulsarĂŠis a todos los habitantes de la tierra delante de vosotros, y destruirĂŠis todas sus piedras grabadas, y destruirĂŠis todas sus imĂĄgenes fundidas, y demolerĂŠis todos sus lugares altosâ (LBLA) â SegĂşn RashĂ, la palabra hebrea que ha sido traducida como âpiedras grabadasâ, mashkiotam,[3] alude a los templos paganos, que normalmente tenĂan el suelo cubierto con piedras de mĂĄrmol, donde adoraban extendiendo las manos y los pies. El Targum traduce esta palabra como âsus templosâ.Â
Este texto nos enseĂąa que el Eterno quiere que haya una sola religiĂłn en la tierra de Israel. Toda influencia pagana estĂĄ prohibida. Esto implica hoy en dĂa que la TorĂĄ prohĂbe que haya iglesias catĂłlicas en la tierra de Israel. HaShem prohĂbe que haya mezquitas en su Tierra. El templo Bahai que estĂĄ en Haifa, estĂĄ prohibido por la TorĂĄ. Toda imagen de Buda, de los santos, de todo dios pagano y de todo objeto de culto de otras religiones fuera del judaĂsmo, estĂĄ prohibida por la TorĂĄ en la tierra de Israel. HaShem ordena eliminar todas estas cosas, pero hoy en dĂa la tierra de Israel estĂĄ llena de idolatrĂa. Muchos judĂos, musulmanes y cristianos estĂĄn incluso ganando mucho dinero por medio de los turistas que vienen a visitar las iglesias, las mezquitas y los museos que estĂĄn llenos de objetos de culto pagano. EstĂĄ prohibido, no solamente tener templos de otras religiones u objetos de su culto, sino tambiĂŠn sacar beneficio econĂłmico de la idolatrĂa. SegĂşn la TorĂĄ, todos los lugares de culto y objetos de culto que no estĂĄn dedicados al Ăşnico y verdadero Dios, el Dios de Israel, tienen que ser eliminados de la Tierra. Todas las imĂĄgenes fundidas tienen que ser eliminadas. Si el pueblo judĂo no lo hace antes, cuando venga el MesĂas por segunda vez, la tierra serĂĄ purificada de toda religiĂłn pagana. Entonces no habrĂĄ ni Cristianismo ni Islam en la tierra de Israel ni en el resto del mundo, sĂłlo el JudaĂsmo bĂblico.
33:55 âPero si no expulsĂĄis de delante de vosotros a los habitantes de la tierra, entonces sucederĂĄ que los que de ellos dejĂŠis serĂĄn como aguijones en vuestros ojos y como espinas en vuestros costados, y os hostigarĂĄn en la tierra en que habitĂŠis.â (LBLA revisada)Â â Los habitantes de la tierra de las siete naciones que no fueran expulsados se convertirĂan en aguijones en los ojos y espinas en los costados de los hijos de Israel, como tambiĂŠn estĂĄ escrito en JosuĂŠ 23:12-13:
âPorque si os volvĂŠis, y os unĂs al resto de estos pueblos que permanecen entre vosotros, y contraĂŠis matrimonio con ellos, y os juntĂĄis con ellos, y ellos con vosotros, ciertamente sabed que HaShem vuestro Dios no continuarĂĄ expulsando a estas naciones de delante de vosotros, sino que serĂĄn como lazo y trampa para vosotros, como azote en vuestros costados y como espinas en vuestros ojos, hasta que perezcĂĄis de sobre esta buena tierra que HaShem vuestro Dios os ha dado.â (LBLA revisada)
En Ezequiel 28:24-26 estĂĄ escrito:
âY no habrĂĄ mĂĄs zarza punzante ni espina dolorosa para la casa de Israel de ninguno de los que la rodean y la desprecian; y sabrĂĄn que yo soy el SeĂąor HaShem. AsĂ dice el SeĂąor HaShem: Cuando yo recoja a la casa de Israel de los pueblos donde estĂĄ dispersa, y manifieste en ellos mi santidad a los ojos de las naciones, entonces habitarĂĄn en su tierra que di a mi siervo Yaakov. Y habitarĂĄn en ella seguros; edificarĂĄn casas, plantarĂĄn viĂąas, y habitarĂĄn seguros, cuando yo haga juicios sobre todos los que a su alrededor la desprecian. Y sabrĂĄn que yo soy el HaShem su Dios.â (LBLA revisada)
AsĂ que, cuando el rabĂ ShaĂşl habla de que tenĂa un aguijĂłn en la carne, que le impedĂa extenderse, lo mĂĄs probable es que se estĂĄ refiriendo a las persecuciones de los incrĂŠdulos, que tuvo que sufrir, como estĂĄ escrito en 2 Corintios 12:7-10:
âY dada la extraordinaria grandeza de las revelaciones, por esta razĂłn, para impedir que me exaltase desmedidamente, me fue dada una espina en la carne, un mensajero del adversario que me abofetee, para que no me enaltezca. Acerca de esto, tres veces he rogado al SeĂąor para que lo quitara de mĂ. Y Ăl me ha dicho: Te basta mi gracia, pues mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, muy gustosamente me gloriarĂŠ mĂĄs bien en mis debilidades, para que el poder del MesĂas more en mĂ. Por eso me complazco en las debilidades, en insultos, en privaciones, en persecuciones y en angustias por amor al MesĂas; porque cuando soy dĂŠbil, entonces soy fuerte.â (LBLA revisada)
RabĂ ShaĂşl no estĂĄ hablando de una enfermedad fĂsica, sino mĂĄs bien de personas incitadas por un demonio que siempre le perseguĂan por dondequiera que iba. AdemĂĄs hay un Midrash, que se asemeja a este texto, que dice que el sumo sacerdote AharĂłn fue golpeado por un mensajero del adversario cada vez que iba a ministrar en el TabernĂĄculo, recordĂĄndole el pecado con el becerro de oro. Todas las persecuciones y adversidades que el rabĂ ShaĂşl tenĂa que pasar fueron para recordarle que habĂa causado la muerte de los judĂos que creĂan en YeshĂşa.
34:2Â Â âManda a los hijos de Israel y diles: Cuando entrĂŠis en la tierra de KenĂĄan, esta es la tierra que os tocarĂĄ como herencia, la tierra de KenĂĄan segĂşn sus fronteras.â (LBLA revisada)Â â La frontera de Israel fue bien definida por una orden divina. De esta manera nadie puede decir que Israel ha robado de las naciones su terreno. HaShem, que es el dueĂąo de cielos y tierra, tiene el derecho de dar las tierras a quiĂŠn desee. La entrega de la tierra de KenĂĄan a los hijos de Israel fue jurĂdicamente justa. HaShem no puede hurtar o cometer injusticia, como estĂĄ escrito en el Salmo 145:17:
âJusto es HaShem en todos sus caminos, y bondadoso en todos sus hechos.â (LBLA revisada)
AquĂ no se trataba de un robo de la tierra de otros, porque esa tierra es del Eterno y ĂŠl habĂa prometido bajo juramento que la iba a dar a Avraham, Yitsjak, Yaakov y sus descendientes para siempre. Cuando la medida del pecado de los hijos de KenĂĄan habĂa llegado al lĂmite perdieron el derecho de vivir, como estĂĄ escrito en GĂŠnesis 15:16:
âY en la cuarta generaciĂłn ellos regresarĂĄn acĂĄ, porque hasta entonces no habrĂĄ llegado a su colmo la iniquidad de los amorreos.â (LBLA)
Si los hijos de KenĂĄan habĂan llegado al colmo de su iniquidad, ÂżcĂłmo entonces podrĂan tener el derecho de heredar la tierra de HaShem donde sĂłlo los justos tienen el derecho de vivir? La destrucciĂłn de Sedom y AmorĂĄ es un ejemplo delante del mundo entero de que los pecadores no tienen el derecho de vivir en la tierra de HaShem, como tambiĂŠn estĂĄ escrito en Mateo 5:5:
âDichosos los humildes, pues ellos heredarĂĄn la tierra.â (LBLA)
SegĂşn Filipenses 2:8 la humildad consiste en hacer la voluntad del Padre, como estĂĄ escrito:
âY estando en esa condiciĂłn de hombre, se humillĂł, haciĂŠndose obediente hasta la muerte, y muerte (por colgamiento) en un ĂĄrbol.â (LBLA revisada)
AsĂ que la humildad consiste en ser obediente. ÂżObediente a quĂŠ? A la InstrucciĂłn del Eterno, la TorĂĄ. Entonces, segĂşn la enseĂąanza del MesĂas, sĂłlo los humildes, los que obedecen la TorĂĄ, tienen el derecho de vivir en la tierra de Israel y sĂłlo los que obedecen la TorĂĄ serĂĄn los que tendrĂĄn el derecho de vivir en la tierra de Israel durante el reino mesiĂĄnico. Los hijos de Israel fueron expulsados de la tierra en varias ocasiones en la historia por causa de no haber obedecido la TorĂĄ. AsĂ que los Ăşnicos que tienen el derecho divino de habitar la tierra de Israel son los que cumplen la TorĂĄ de HaShem. Los judĂos que viven en idolatrĂa no tienen ningĂşn derecho ante el cielo de permanecer en la tierra de Israel. La tierra es para los justos, no para los pecadores.
En Ăxodo 23:31-33 estĂĄ escrito:
âY fijarĂŠ tus lĂmites desde el mar de CaĂąas hasta el mar de los filisteos, y desde el desierto hasta el rĂo (Eufrates); porque en tus manos entregarĂŠ a los habitantes de esa tierra, y tĂş los echarĂĄs de delante de ti. No harĂĄs pacto con ellos ni con sus dioses. Ellos no habitarĂĄn en tu tierra, no sea que te hagan pecar contra mĂ; porque si sirves a sus dioses, ciertamente esto serĂĄ tropezadero para ti.â (LBLA revisada)
En el Salmo 25:12-13 estĂĄ escrito:
âÂżQuiĂŠn es el hombre que teme a HaShem? Ăl le instruirĂĄ en el camino que debe escoger. En prosperidad habitarĂĄ su alma, y su descendencia poseerĂĄ la tierra.â (LBLA revisada)
En el Salmo 37:22, 29 estĂĄ escrito:
âPorque los que son bendecidos por HaShem poseerĂĄn la tierra, pero los maldecidos por Ăl serĂĄn exterminados… Los justos poseerĂĄn la tierra, y para siempre morarĂĄn en ella.â (LBLA revisada)
Los que quebrantan los mandamientos puestos por HaShem son maldecidos por Ăl y pierden el derecho de la tierra, cf. LevĂtico 26 y Deuteronomio 28.
En el Salmo 69:35-36 estĂĄ escrito:
âPorque Dios salvarĂĄ a TsiĂłn y edificarĂĄ las ciudades de YehudĂĄ, para que ellos moren allĂ y la posean. Y la descendencia de sus siervos la heredarĂĄ, y los que aman su nombre morarĂĄn en ella.â (LBLA revisada)
Los hijos de Israel actuaron bajo un mandato divino en la conquista de la tierra exterminando aquellas naciones. Todas ellas tenĂan la misma posibilidad que la ramera Rajav en YerijĂł para convertirse de sus pecados y entregarse al Dios de Israel, pero se obstinaron en seguir pecando y resistiendo al AltĂsimo. Por lo tanto perdieron el derecho de la Tierra de HaShem. Esa tierra ha sido escogida por el Eterno de una manera especial y la llama Suya, como estĂĄ escrito en JeremĂas 2:7:
âYo os traje a una tierra fĂŠrtil, para que comierais de su fruto y de sus delicias; pero vinisteis y contaminasteis mi tierra, y de mi heredad hicisteis abominaciĂłn.â (LBLA)
En Deuteronomio 11:12 estĂĄ escrito:
âEs una tierra que HaShem tu Dios cuida; los ojos de HaShem tu Dios estĂĄn siempre sobre ella, desde el principio hasta el fin del aĂąo.â (LBLA revisada)
En JeremĂas 16:18 estĂĄ escrito:
âPero primero, pagarĂŠ al doble su iniquidad y su pecado, porque ellos han contaminado mi tierra con los cadĂĄveres de sus Ădolos abominables y han llenado mi heredad con sus abominaciones.â (LBLA)
En Ezequiel 36:5 estĂĄ escrito:
âpor eso, asĂ dice el SeĂąor HaShem: ‘Ciertamente en el fuego de mi celo he hablado contra las demĂĄs naciones y contra todo Edom, que se han apropiado para sĂ de mi tierra como posesiĂłn, con alegrĂa, de todo corazĂłn y con desprecio de alma, para dejarla como presa.’â
En Joel 2:18 estĂĄ escrito:
âEntonces HaShem se llenarĂĄ de celo por su tierra, y tendrĂĄ piedad de su pueblo.â (LBLA revisada)
En Joel 3:1-2 estĂĄ escrito:
âPorque he aquĂ que en aquellos dĂas y en aquel tiempo, cuando yo restaure el bienestar de YehudĂĄ e Yerushalayim, reunirĂŠ a todas las naciones, y las harĂŠ bajar al valle de Yehoshafat. Y allĂ entrarĂŠ en juicio con ellas a favor de mi pueblo y mi heredad, Israel, a quien ellas esparcieron entre las naciones, y repartieron mi tierra.â (LBLA revisada)
Este texto enseĂąa que el juicio de HaShem va a caer sobre todas las naciones que han repartido Su tierra.
34:12b âEsta serĂĄ vuestra tierra, segĂşn sus fronteras alrededor.â (LBLA)Â â Otra de las razones por las cuales la TorĂĄ define bien dĂłnde estĂĄn las fronteras de la tierra es para que se sepa en quĂŠ ĂĄrea se aplican los mandamientos de la TorĂĄ que sĂłlo se pueden cumplir en la Tierra de Israel.
Desde el principio de la creaciĂłn HaShem ha puesto lĂmites que hacen la diferencia entre una cosa y otra. Ya en el huerto del EdĂŠn habĂa lĂmites entre diferentes paĂses. AdemĂĄs HaShem puso un lĂmite entre lo que estaba permitido comer y lo que estaba prohibido comer. Estos lĂmites existĂan antes de que el pecado entrara en el mundo. Esto nos enseĂąa que no es el pecado que ha causado que la TorĂĄ trace lĂmites entre una cosa y otra. El trazo de los lĂmites es parte de la misma creaciĂłn. Incluso en el tabernĂĄculo en el cielo hay diferentes habitaciones y niveles con lĂmites entre ellos. Toda cosa creada necesita lĂmites en los cuales existir y funcionar, como estĂĄ escrito en Hechos 17:26:
ây de uno hizo todas las naciones del mundo para que habitaran sobre toda la faz de la tierra, habiendo determinado sus tiempos seĂąalados y los lĂmites de su habitaciĂłnâ (LBLA)
La esencia del pecado es traspasar o cambiar los lĂmites, cf. 1 Juan 3:4.
Entonces el MesĂas no vino para quitar los lĂmites, ni cambiar los lĂmites, sino para ayudar al hombre a respetar y funcionar dentro de los lĂmites que estĂĄn marcados por HaShem en la TorĂĄ. El que predica a un MesĂas que vino para cambiar o quitar los lĂmites que han sido marcados por el Eterno, estĂĄ presentando un falso mesĂas. La esencia del espĂritu del anti-mesĂas es que cambie los lĂmites puestos por HaShem en la TorĂĄ, como estĂĄ escrito en Daniel 7:25-26:
âY ĂŠl proferirĂĄ palabras contra el AltĂsimo y afligirĂĄ a los santos del AltĂsimo, e intentarĂĄ cambiar los tiempos y la ley; y le serĂĄn entregados en sus manos por un tiempo, por tiempos y por medio tiempo. Pero el tribunal se sentarĂĄÂ (para juzgar), y su dominio le serĂĄ quitado, aniquilado y destruido para siempre.â (LBLA)
En 2 Tesalonicenses 2:3-4, 7-8 estĂĄ escrito:
âQue nadie os engaĂąe en ninguna manera, porque (no vendrĂĄ) sin que primero venga la apostasĂa y sea revelado el hombre de pecado, el hijo de perdiciĂłn, el cual se opone y se exalta sobre todo lo que se llama dios o es objeto de culto, de manera que se sienta en el templo de Dios, presentĂĄndose como si fuera Dios… Porque el misterio de la iniquidad ya estĂĄ en acciĂłn, sĂłlo que aquel que por ahora lo detiene, lo harĂĄ hasta que ĂŠl mismo sea quitado de en medio. Y entonces serĂĄ revelado ese inicuo, a quien el SeĂąor matarĂĄ con el espĂritu de su boca, y destruirĂĄ con el resplandor de su venida.â (LBLA)
La palabra griega que ha sido traducida como âiniquidadâ es anomĂa[4] que significa âalegalidadâ o âsin leyâ. La palabra griega que ha sido traducida como âinĂcuoâ es anomos[5] que significa âalegalâ, âuno que no se sujeta a la TorĂĄâ. AquĂ se habla del hombre de pecado, el a-legal, y el misterio de la a-legalidad. Este es el espĂritu del anti-mesĂas, que resiste la ley del Eterno e intenta cambiarlo y eliminarlo y sus lĂmites. El hombre a-legal es un hombre totalmente carnal, como estĂĄ escrito en Romanos 8:7-8:
âla mente carnal es enemiga de Dios, porque no se sujeta a la ley de Dios, pues ni siquiera puede hacerlo, y los que estĂĄn en la carne no pueden agradar a Dios.â (LBLA)
Lo que va a caracterizar la Ăşltima generaciĂłn antes de la venida del MesĂas es que no sabrĂĄ dĂłnde estĂĄn los lĂmites. No sabrĂĄn la diferencia entre hombre y mujer, entre jĂłvenes y mayores, entre lo bueno y lo malo, entre lo justo y lo injusto, entre la luz y las tinieblas, entre la verdad y la mentira o entre lo permitido y lo prohibido. HaShem ha marcado en la TorĂĄ dĂłnde estĂĄn los lĂmites, pero el hombre perverso lo tuerce todo. El hombre perverso enseĂąa que âCristoâ vino para quitar la ley o para cambiar los lĂmites marcados por la ley de MoshĂŠ. El fin de ese hombre perverso es la muerte.
La parashĂĄÂ de esta semana nos enseĂąa que HaShem pone lĂmites muy bien definidos para Israel y las naciones. Dichoso el hombre que respeta esos lĂmites.
34:5 âY la frontera cambiarĂĄ de direcciĂłn de AtsmĂłn al torrente de Egipto, y su tĂŠrmino serĂĄ el mar.â (LBLA revisada)Â â El torrente de Egipto no se refiere al rĂo Nilo sino a un arroyo que estĂĄ en la llamada penĂnsula de SinaĂ. Su nombre actual es Wadi el-Arish. En esta ocasiĂłn el pueblo de Israel no recibiĂł todo el terreno que el Eterno habĂa prometido a los padres. No recibirĂĄn toda la tierra prometida hasta que venga el MesĂas YeshĂşa de nuevo.
34:8 âTrazarĂŠis una lĂnea desde el monte Hor hasta la entrada de Jamat, y el tĂŠrmino de la frontera serĂĄ Tsedadâ â SegĂşn RashĂ, la ciudad de Jamat es la que mĂĄs adelante serĂa la ciudad siria de Antioquia. En el libro de los Hechos de los apĂłstoles hay dos ciudades con el nombre AntioquĂa, una estaba en la provincia romana Siria, en la costa, que es la que se menciona en 11:19-27 y 13:1, y la otra estaba en Asia Menor, en Pisidia, mencionada en 13:14.
Cuarta aliyĂĄ, 34:15-29
34:15 âLas dos tribus y la media tribu han recibido su posesiĂłn al otro lado del YardĂŠn, frente a YerijĂł, al oriente, hacia la salida del sol.â (LBLA revisada)Â â La expresiĂłn âal otro lado del YardĂŠnâ se encuentra en muchos lugares de las Escrituras, cf. NĂşmeros 22:1; 35:14; Deuteronomio 1:1, 5; 3:8, 20; 4:41, 47, 49; JosuĂŠ 1:14, 15 etc., casi siempre refiriĂŠndose a la parte oriental, este, del rĂo, donde obtuvieron su territorio las dos tribus y media. Es interesante ver que, aunque MoshĂŠ no estaba ubicado al oeste del rĂo, en la tierra de KenĂĄan propiamente dicha, al usar esta expresiĂłn, es como si la TorĂĄ viniese desde allĂ. Cuando HaShem redactĂł este texto a MoshĂŠ, los hijos de Israel todavĂa no habĂan pasado el rĂo YardĂŠn, y aun asĂ se habla de la tierra que esta âal otro lado del YardĂŠnâ. AllĂ estaba MoshĂŠ junto con el pueblo. Esto nos enseĂąa que la TorĂĄ sale de la tierra de Israel, y mĂĄs especĂficamente desde TsiĂłn, como estĂĄ escrito en IsaĂas 2:3b:
âPorque de TsiĂłn saldrĂĄ la TorĂĄ, y de Yerushalayim la palabra de HaShem.â (LBLA revisada)
En AmĂłs 1:2 estĂĄ escrito:
âY dijo: HaShem ruge desde TsiĂłn, y desde Yerushalayim da su voz; los pastizales de los pastores estĂĄn de duelo, y se seca la cumbre del Karmel.â (LBLA revisada)
EstĂĄ escrito en texto hebreo de Ezequiel 5:5 y 38:12 que Yerushalayim es el ombligo del mundo, es decir, el centro de la tierra.
Quinta aliyĂĄ, 35:1-8
35:7Â Â âTodas las ciudades que darĂŠis a los levitas serĂĄn cuarenta y ocho ciudades, junto con sus tierras de pasto.â (LBLA)Â â Los levitas recibieron 48 ciudades en todo el territorio de Israel. Seis de ellas servirĂan como ciudades de refugio. Alrededor de cada ciudad tenĂan un terreno de dos mil codos en cada direcciĂłn. En el versĂculo 4 se habla de mil codos y en el versĂculo 5 se habla de dos mil codos. El Talmud[6]Â resuelve esta aparente contradicciĂłn diciendo que los primeros mil codos fueron dejados como espacio abierto y los otros mil codos servĂan para campos y viĂąas.
Sexta aliyå, 35:9-34
35:11 âescogerĂŠis para vosotros ciudades para que sean vuestras ciudades de refugio, a fin de que pueda huir allĂ el homicida que haya matado a alguna persona sin intenciĂłn.â (LBLA) â Si una persona mataba a alguien por accidente tenĂa la posibilidad de huir a una de las seis ciudades de refugio, en hebreo arei miklat. Cuando alguien habĂa matado a otro, uno de los familiares mĂĄs cercanos al muerto tenĂa la autoridad de ser el âvengador de la sangreâ del muerto, en hebreo goel[7] hadam âredentor de la sangreâ, para ejecutar la venganza de HaShem y derramar la sangre de aquel que habĂa matado a su familiar, conforme a GĂŠnesis 9:6 donde estĂĄ escrito:
âEl que derrame sangre de hombre, por el hombre su sangre serĂĄ derramada, porque a imagen de Dios hizo Ăl al hombre.â (LBLA)
35:25 âY la congregaciĂłn librarĂĄ al homicida de la mano del vengador de sangre, y la congregaciĂłn lo restaurarĂĄ a la ciudad de refugio a la cual huyĂł; y vivirĂĄ en ella hasta la muerte del sumo sacerdote que fue ungido con Ăłleo santo.â (LBLA) â AquĂ la palabra âcongregaciĂłnâ se refiere al corte de justicia, el Beit Din. El Talmud[8] enseĂąa que en el caso de que el que habĂa muerto no tuviera ningĂşn familiar que pudiera ser el goel hadam, el Beit Din tenĂa la responsabilidad para proveer con uno. Este goel tenĂa la autoridad para matar al asesino en todo lugar donde lo encontrara. Pero si el tribunal juzgaba que el homicida habĂa matado sin intenciĂłn, el goel tenĂa prohibido vengarle dentro del ĂĄrea de la ciudad de refugio. El que habĂa huido a una ciudad de refugio tendrĂa que estar fuera de su propia casa durante todo el tiempo en que permanecĂa con vida el Sumo Sacerdote que estaba en funciones cuando sucediĂł el accidente. Incluso el que haya matado a otra persona por medio de un accidente tiene que sufrir un tipo de castigo de cĂĄrcel. Esto nos enseĂąa cuĂĄnto HaShem valora una vida humana. No obstante, este tipo de cĂĄrcel fue un lugar de santidad donde vivĂan los levitas, que dedicaban la mayor parte del tiempo al estudio de la TorĂĄ. Pero en el momento de la muerte del Sumo Sacerdote, la persona quedaba libre para volver a su propia casa y su propio terreno y el vengador de la sangre perdiĂł su derecho de ejecutarle.
SÊptima aliyå,  36:1-13
36:6Â Â âEsto es lo que HaShem ha ordenado tocante a las hijas de Tselofjad, diciendo: “CĂĄsense con el que bien les parezca; pero deben casarse dentro de la familia de la tribu de su padre.ââ (LBLA revisada)Â â La herencia de los terrenos en Israel se daba en primer lugar a los hijos varones. Cuando una hija se casaba podĂa gozar de un terreno y una casa en la tribu de su esposo. Sin embargo, en este caso algunas hijas de Israel recibieron un terreno de su padre, por no tener hermanos. Ellas tenĂan que casarse dentro de su propia tribu para que su terreno no pasara a la posesiĂłn de otras tribus.
âCĂĄsense con el que bien les parezcaâ â Esto nos enseĂąa que HaShem no ha destinado una sola persona con la cual se puede casar. HaShem da libertad para que uno pueda casarse con la pareja que bien le parezca con tal que sea dentro de la tribu de uno. El mismo pensamiento se encuentra en 1 Corintios 7:39:
âLa mujer estĂĄ ligada mientras el marido vive; pero si el marido muere, estĂĄ en libertad de casarse con quien desee, sĂłlo que en el SeĂąor.â (LBLA)
Este texto dice que una viuda tiene el derecho de casarse con quien quiera, sĂłlo que en el SeĂąor, es decir, con uno que tiene la fe de YeshĂşa. Por su puesto no tiene el derecho de querer a uno que estĂŠ en un pacto matrimonial con otra persona, porque no puede codiciar el esposo de su prĂłjimo. Una mujer divorciada tiene el mismo estado que una viuda, porque ya no tiene marido. Por medio del divorcio fue liberada del varĂłn que antes era su esposo. Este texto no puede ser utilizado para impedir a los divorciados a casarse de nuevo. Sin embargo, si el esposo es creyente, ella no tiene el derecho de casarse con otro, segĂşn 1 Corintios 7:10-11, sino debe buscar la reconciliaciĂłn con ĂŠl. Ahora, si el esposo creyente divorciado hace un nuevo pacto matrimonial con otra mujer, la mujer divorciada se quedarĂĄ libre para casarse con quien quiera, de la misma manera como una viuda.
Un creyente no tiene el derecho de casarse con uno que no cree en YeshĂşa, como estĂĄ escrito en 2 Corintios 6:14-18:
âNo estĂŠis unidos en yugo desigual con los incrĂŠdulos (que no creen en YeshĂşa), pues ÂżquĂŠ asociaciĂłn tienen la justicia y la iniquidad? ÂżO quĂŠ comuniĂłn la luz con las tinieblas? ÂżO quĂŠ armonĂa tiene el MesĂas con Belial? ÂżO quĂŠ tiene en comĂşn un creyente con un incrĂŠdulo? ÂżO quĂŠ acuerdo tiene el templo de Dios con los Ădolos? Porque nosotros somos el templo del Dios vivo, como Dios dijo: HABITARĂ EN ELLOS, Y ANDARĂ ENTRE ELLOS; Y SERĂ SU DIOS, Y ELLOS SERĂN MI PUEBLO. Por tanto, SALID DE EN MEDIO DE ELLOS Y APARTAOS, dice el SeĂąor; Y NO TOQUĂIS LO INMUNDO, y yo os recibirĂŠ. Y yo serĂŠ para vosotros padre, y vosotros serĂŠis para mĂ hijos e hijas, dice el SeĂąor Todopoderoso.â (LBLA revisada)
MashĂaj en esta parashĂĄ
33:37-39 âPartieron de Kadesh y acamparon en el monte Hor, al extremo de la tierra de Edom. Entonces el sacerdote AharĂłn subiĂł al monte Hor por mandato de HaShem, y allĂ muriĂł, el aĂąo cuarenta despuĂŠs que los hijos de Israel habĂan salido de la tierra de Egipto, el primer dĂa del mes quinto. AharĂłn tenĂa ciento veintitrĂŠs aĂąos de edad cuando muriĂł en el monte Hor.â (LBLA revisada) â En el campamento numero 33 desde la salida de Egipto muriĂł el Sumo Sacerdote AharĂłn sobre un monte, el monte llamado Hor, que significa âmontaĂąaâ. Ăl fue un mashiaj, un ungido, el primero que es llamado mashiaj en las Escrituras, cf. LevĂtico 4:3, 5, 16. Este suceso es una figura profĂŠtica de YeshĂşa HaMashĂaj, que tambiĂŠn muriĂł sobre un monte, a la edad de 33 aĂąos, que coincide con el nĂşmero 33 de las jornadas de Israel desde la salida.
âmuriĂł, el aĂąo cuarenta despuĂŠs que los hijos de Israel habĂan salido de la tierra de Egipto.â (LBLA revisada) â Esto alude a la muerte y resurrecciĂłn de MashĂaj 4000 aĂąos despuĂŠs de la creaciĂłn de Adam. En GĂŠnesis 13:10 Egipto es comparado con el huerto del EdĂŠn. De esa manera hay una conexiĂłn entre la expulsiĂłn de Adam y JavĂĄ del paraĂso y la salida de Egipto de los hijos de Israel. Por lo tanto, de la misma manera como AharĂłn, el ungido, muriĂł 40 aĂąos despuĂŠs de la salida de Egipto, YeshĂşa el MesĂas muriĂł 4000 (100 x 40) aĂąos despuĂŠs de la salida de los primeros hombres del huerto del EdĂŠn.
Es mĂĄs, AharĂłn muriĂł el primer dĂa del 5Âş mes, exactamente 3 ½ meses despuĂŠs de la fecha de la salida, el dĂa 15 del primer mes. Los 3 ½ meses aluden a los 3 ½ aĂąos de ministerio del MesĂas, despuĂŠs de los cuales muriĂł, y resucitĂł. Como Aharon muriĂł 3 ½ meses despuĂŠs de la fecha de salida, YeshĂşa muriĂł 3 ½ aĂąos despuĂŠs de haber empezado su ministerio pĂşblico.
AharĂłn tenĂa tres aĂąos mĂĄs de vida que su hermano MoshĂŠ, que muriĂł a los 120 aĂąos. Esos tres aĂąos tambiĂŠn nos hablan del MesĂas, que tenĂa tres aĂąos y pico de ministerio, que tenĂa 30 aĂąos y pico de edad cuando muriĂł y que estuvo tres dĂas en el interior de la tierra antes de resucitar. El monte Hor es mencionado tres veces en el texto.
35:19 âEl vengador de sangre, (goel hadam), Êl mismo darĂĄ muerte al asesino; le darĂĄ muerte cuando se encuentre con ĂŠl.â (LBLA revisada) â De esto aprendemos que hay una persona que es llamada goel hadam, âredentor de la sangreâ o âvengadorâ, que tiene la responsabilidad de buscar y ejecutar al asesino.
¿QuiÊn fue el que mató al primer hombre y que por lo tanto es llamado homicida por nuestro Rabino, según Juan 8:44 y 10:10?  La respuesta es: el adversario.
ÂżQuiĂŠn es el familiar mĂĄs cercano de Adam y JavĂĄ? La repuesta es: el MesĂas ben Adam, el Hijo del Hombre, que fue el prototipo que HaShem usĂł para la creaciĂłn de Adam.
ÂżQuiĂŠn, pues, tiene la responsabilidad de buscar y ejecutar al que asesinĂł al ser humano? La respuesta es: YeshĂşa HaMashĂaj, como estĂĄ escrito en Juan 12:31:
âYa estĂĄ aquĂ el juicio de este mundo; ahora el prĂncipe de este mundo serĂĄ echado fuera.â (LBLA revisada)
En Juan 16:11estĂĄ escrito:
ây de juicio, porque el prĂncipe de este mundo ha sido juzgado.â (LBLA revisada)
En 1 Juan 3:8b estĂĄ escrito:
âEl Hijo de Dios se manifestĂł con este propĂłsito: para destruir las obras del diablo.â (LBLA)
35:25, 28 âY la congregaciĂłn librarĂĄ al homicida de la mano del vengador de sangre, y la congregaciĂłn lo restaurarĂĄ a la ciudad de refugio a la cual huyĂł; y vivirĂĄ en ella hasta la muerte del sumo sacerdote que fue ungido con Ăłleo santo⌠porque el homicida debiĂł haber permanecido en la ciudad de refugio hasta la muerte del sumo sacerdote. Pero despuĂŠs de la muerte del sumo sacerdote, el homicida volverĂĄ a su tierra.â (LBLA revisada) â Tres veces se habla aquĂ de la muerte del Sumo Sacerdote. Otra vez se encuentra el nĂşmero tres en relaciĂłn con la muerte del Sumo Sacerdote, lo cual es una alusiĂłn a la muerte del MesĂas. Lo Ăşnico que podĂa liberar al asesino por accidente de su situaciĂłn de exilio es la muerte del Sumo Sacerdote âque fue ungido con Ăłleo santo.â La TorĂĄ destaca el hecho de que el Sumo Sacerdote habĂa sido ungido para aludir a YeshĂşa, el Ungido, en hebreo HaMashĂaj. Por medio de su muerte somos liberados de las consecuencias de nuestros pecados que hemos cometido por error.
Querido lector, si estĂĄs sufriendo una âcĂĄrcelâ por haber hecho cosas terribles por error, debes saber que la muerte de YeshĂşa tambiĂŠn ha provisto para que seas libre de esas consecuencias y no serĂĄn levantadas en tu contra en el juicio final.
35:33 âAsĂ que no contaminarĂŠis la tierra en que estĂĄis; porque la sangre contamina la tierra, y no se puede hacer expiaciĂłn por la tierra, por la sangre derramada en ella, excepto mediante la sangre del que la derramĂł.â (LBLA) â AquĂ vemos la gravedad de un delito de asesinato. Un asesino tiene que ser juzgado por las autoridades de cada paĂs, para que la justicia del Eterno se establezca en el mundo. SegĂşn la ley judĂa no se puede juzgar a muerte a una persona que no haya sido advertida por dos o tres personas antes de cometer un asesinato. La TorĂĄ destaca la importancia de no dejar con vida al asesino que haya sido condenado a muerte, para que no se contamine la tierra de Israel. El derramamiento de sangre inocente en la tierra es una de las cosas que traen el juicio divino sobre Israel y las naciones. La manera de evitar el juicio divino por los asesinatos es ejecutar a los asesinos. Si los asesinos no son juzgados correctamente todo el pueblo serĂĄ objeto del juicio por la sangre inocente que haya sido derramada en la tierra, cf. 2 Reyes 24:4.
Sin embargo, cuando el asesino se arrepienta, no se aplicarĂĄ la ley en su rigor y el culpable debe ser absuelto de la pena de muerte y recibir una pena menos severa. Pero donde no hay arrepentimiento hay que aplicar la ley en toda su fuerza para evitar que la tierra sea contaminada y maldecida.
ÂżCĂłmo puede el Eterno perdonar al pecador que se arrepiente si la Ăşnica manera de hacer expiaciĂłn por un asesinato es que el culpable pague con su propia sangre, segĂşn este texto? ÂżCĂłmo el Eterno puede perdonar y absolver al culpable y al mismo tiempo seguir siendo justo?
En Proverbios 17:15 estĂĄ escrito:
âEl que justifica al impĂo, y el que condena al justo, ambos son igualmente abominaciĂłn a HaShem.â (LBLA revisada)
Si un juez justifica al impĂo estĂĄ cometiendo un acto abominable para el Eterno. ÂżCĂłmo entonces el Juez Justo Celestial podrĂĄ justificar al impĂo que se arrepiente y seguir siendo justo? La Ăşnica respuesta es: Por medio de un sustituto.
Los animales que murieron en el templo no podĂan representar plenamente al hombre. No fueron sustitutos verdaderos. SĂłlo constituyen una sombra del Ăşnico y verdadero sacrificio por los pecados de todos los hombres durante toda la historia, el sacrificio del Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. La muerte de YeshĂşa HaMashĂaj es la Ăşnica base legalmente justa sobre la cual el Eterno puede seguir siendo justo al perdonar y justificar a un pecador que se arrepiente de su pecado, como estĂĄ escrito en Romanos 3:24b-26:
âMashĂaj YeshĂşa, a quien Dios exhibiĂł pĂşblicamente como propiciaciĂłn por su sangre a travĂŠs de la fe, como demostraciĂłn de su justicia, porque en su tolerancia, Dios pasĂł por alto los pecados cometidos anteriormente, para demostrar en este tiempo su justicia, a fin de que Ăl sea justo y sea el que justifica al que es de la fe de YeshĂşa.â (LBLA revisada)
La Ăşnica manera como el Eterno puede demostrar al mundo entero su justicia al perdonar a los pecadores arrepentidos, es por medio de la exhibiciĂłn pĂşblica de la muerte sangrienta de Aquel que muriĂł en lugar del hombre, como estĂĄ escrito en 2 Corintios 5:21:
âAl que no conociĂł pecado, le hizo pecado por nosotros, para que fuĂŠramos hechos justicia de Dios en ĂŠl.â (LBLA)
AsĂ que cuando te sientes acusado por tu conciencia que ha sido despertada por el mensaje de la TorĂĄ y por medio de la convicciĂłn del EspĂritu de Santidad que ha sido enviado para convencer al mundo de pecado, debes saber, querido lector, que hay un sustituto que sufriĂł en tu lugar para que no tengan que venir sobre ti todas las consecuencias mortales de tu pecado. Por medio de tu arrepentimiento HaShem traspasa la Ăşltima consecuencia de tu pecado al Sustituto, para que tĂş no tengas que morir por tus pecados, sino ser perdonado y justificado. La justificaciĂłn por fe en la sangre de YeshĂşa te pone en una situaciĂłn de inocencia delante del Tribunal Celestial y podrĂĄs tener paz con Dios, como estĂĄ escrito en Romanos 5:1-2:
âPor tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro SeĂąor YeshĂşa HaMashĂaj, por medio de quien tambiĂŠn hemos obtenido entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.â (LBLA revisada)
ÂĄBendito sea el Eterno por este intercambio de papeles!
En esta ParashĂĄÂ se encuentran los mandamientos nĂşmeros 408 â 413 de los 613:
Precepto de dar a los levitas ciudades para habitar y ciudades de refugio, NĂşmeros 35:2.
ProhibiciĂłn de ejecutar a una persona culpable antes de hacerle un juicio, NĂşmeros 35:12.
Precepto para la Corte de Justicia de hacer que un homicida vaya a una ciudad de refugio, y precepto para el homicida de ir a ella, NĂşmeros 35:25.
ProhibiciĂłn de que un testigo en un caso capital participe en el juicio, excepto como testigo, NĂşmeros 35:30.
ProhibiciĂłn de tomar rescate por un asesino, NĂşmeros 35:31.
ProhibiciĂłn de tomar rescate de un homicida accidental para que pueda vivir fuera de la ciudad de refugio, NĂşmeros 35:32.
[1]Â Â Â Â Â Â Â Bamidbar RabĂĄ 23:3.
[2]Â Â Â Â Â Â Â ErubĂn 55b.
[3]       Strong H4906 masĂŹkiĚyth, mas-keeth’, From the same as H7906; a figure (carved on stone, the wall, or any object); figuratively imagination: –  conceit, image (-ry), picture, X wish.
[4]     Strong G458 ιĚνοΟΚÏι, anomia, an-om-ee’-ah, From G459; illegality, that is, violation of law or (generally) wickedness: – iniquity, X transgress (-ion of) the law, unrighteousness.
[5]     Strong G459 ιĚÏνοΟοĎ, anomos, an’-om-os, From G1 (as a negative particle) and G3551; lawless, that is, (negatively) not subject to (the Jewish) law; (by implication a Gentile), or (positively) wicked: – without law, lawless, transgressor, unlawful, wicked.
[6]Â Â Â Â Â Â Â SotĂĄ 27b.
[7]       Strong H1350 gaĚ’al, gaw-al’, A primitive root, to redeem (according to the Oriental law of kinship), that is, to be the next of kin (and as such to buy back a relativeâs property, marry his widow, etc.): –  X in any wise, X at all, avenger, deliver, (do, perform the part of near, next) kinsfolk (-man), purchase, ransom, redeem (-er), revenger.
[8]Â Â Â Â Â Â Â SanhedrĂn 45b.
Shema Israel Communities, is a network of Communities (synagogues) of messianic conviction, established in several in some States of the USA, and in some cities of some countries such as USA, Mexico, Guatemala, Costa Rica, Colombia , Brazil, and in Spain, in the city of Malaga; The Shema Israel Synagogues are established with a vision to house the Bney Anusim and those who identify with Israel and the Jewish People. Each community is deeply identified with the Jewish Messiah Yeshua haMashiach and the Apostolic Writings; A network of congregations observing the Torah, the Feasts of the Eternal and of course the Shabath and the Kasherut.