Shema Israel Communities, is a network of Communities (synagogues) of messianic conviction, established in several in some States of the USA, and in some cities of some countries such as USA, Mexico, Guatemala, Costa Rica, Colombia , Brazil, and in Spain, in the city of Malaga; The Shema Israel Synagogues are established with a vision to house the Bney Anusim and those who identify with Israel and the Jewish People. Each community is deeply identified with the Jewish Messiah Yeshua haMashiach and the Apostolic Writings; A network of congregations observing the Torah, the Feasts of the Eternal and of course the Shabath and the Kasherut.
ParashĂĄ 53 Haazinu
Deuteronomio 32:1-52
Por Dr. K. Blad Š
Segunda edicion 2013-14 (5774
Prohibida toda reproduccion lucrativa Â
AliyĂĄs de la TorĂĄ:
32:1-6
32:7-12
32:13-18
32:19-28
32:29-39
32:40-43
32:44-52
Maftir: 32:48-52
HaftarĂĄ:Â 2 Samuel 22:1-51
Haazinu
Significa âprestad oĂdoâ.
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Primera aliyĂĄ, 32:1-6
Este cĂĄntico de MoshĂŠ estĂĄ hablando de toda la historia de Israel desde el principio hasta el final. PodrĂamos resumir su contenido segĂşn las seis primeras lecturas:
1-6Â Â Â Â Â Â Â Â El Nombre y la obra de HaShem por el mundo y por Israel.
7-12Â Â Â Â Â Â El origen de Israel.
13-18Â Â Â Â La prosperidad y la apostasĂa de Israel.
19-26Â Â Â Â La pĂŠrdida de Israel despuĂŠs de su apostasĂa.
29-39Â Â Â Â La dispersiĂłn de Israel entre las naciones.
40-43Â Â Â Â La salvaciĂłn de Israel y su influencia mundial.
1-6 El Nombre y la obra de HaShem por el mundo y por Israel
32:1 âPrestad atenciĂłn, oh cielos, y dejadme hablar; y escuche la tierra las palabras de mi boca.â (LBLA) â Los cielos y la tierra son dos testigos contra Israel, cf. 30:19; 31:28, porque han documentado toda su historia. Realmente son tres testigos, porque la palabra hebrea para cielos, shamayim, estĂĄ escrita de forma dual, es decir se trata de un par de cielos. La historia de Israel estĂĄ escrita tanto en los cielos como en la tierra. Estos dos o tres testigos serĂĄn los primero en âtirar piedrasâ contra Israel si comete infidelidad contra el pacto, cf. Deuteronomio 11:17; 17:7. HaShem tiene que crear nuevos cielos y nueva tierra despuĂŠs del milenio, para que estos dos o tres testigos no sigan hablando en contra de Israel, recordando su historia pecaminosa.
En IsaĂas 65:17-18 estĂĄ escrito:
âPues he aquĂ, yo creo cielos nuevos y una tierra nueva, y no serĂĄn recordadas las cosas primeras ni vendrĂĄn a la memoria. Pero gozaos y regocijaos para siempre en lo que yo voy a crear; porque he aquĂ, voy a crear a Yerushalayim para regocijo, y a su pueblo para jĂşbilo.â (LBLA revisada)
En RevelaciĂłn 21:1 estĂĄ escrito:
âY vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existe.â (LBLA)
Los cielos y la tierra son tomados como testigos por causa de su firmeza, cf. JeremĂas 31:35-37. El rollo de la TorĂĄ puede ser quemado, pero no las estrellas ni las piedras. Son testigos muy firmes.
MoshĂŠ mencionĂł primero los cielos y luego la tierra. Esto nos enseĂąa que ĂŠl estaba mĂĄs cerca del cielo que de la tierra.
32:2 âCaiga como la lluvia mi enseĂąanza, y destile como el rocĂo mi discurso, como llovizna sobre el verde prado y como aguacero sobre la hierba.â (LBLA) â La lluvia representa la TorĂĄ Escrita, que viene directamente del cielo en cantidades que se pueden medir. El rocĂo puede representar la halajĂĄ,[1] que viene de la tierra, de los hombres, es flexible y no tiene lĂmites al ir cambiando segĂşn las necesidades de cada generaciĂłn.
Hay 42 versĂculos en esta canciĂłn a partir del versĂculo 2. Estos 42 versĂculos corresponden al Nombre grande de HaShem con 42 letras, mencionado en el Talmud.[2]Â SegĂşn R. Munk,[3]Â cada versĂculo explica uno de los misterios de ese Nombre.
32:3 âPorque yo proclamo el nombre de HaShem; atribuid grandeza a nuestro Dios.â (LBLA revisada)Â â A base de este versĂculo el Talmud[4]Â ha establecido la norma de no leer o estudiar la TorĂĄ sin hacer una bendiciĂłn previa. Este texto tambiĂŠn nos exhorta a bendecir a Dios cuando alguien estĂĄ proclamando el Nombre de HaShem. Por esta razĂłn, cuando alguien estĂĄ pronunciando una bendiciĂłn y menciona el Nombre, los que lo oyen contestan: âBaruj Hu u-varuj ShemĂłâ, âBendito es Ăl y bendito es Su Nombreâ. Cuando oyeron la pronunciaciĂłn del Nombre en el segundo templo, contestaron con la bendiciĂłn: âBaruj Shem kevod MaljutĂł le-olam va-edâ, âBendito sea el Nombre glorioso de Su Reino por siempre jamĂĄsâ.
TambiĂŠn existe el deber de bendecir al Eterno despuĂŠs de haber leĂdo la TorĂĄ en la sinagoga. La bendiciĂłn despuĂŠs de la lectura de la TorĂĄ viene del mandamiento de bendecir al Eterno despuĂŠs de haber comido, cf. Deuteronomio 8:10. La TorĂĄ es la comida del alma y HaShem merece una bendiciĂłn despuĂŠs de que nos hayamos saciado con su TorĂĄ.
32:4 âÂĄLa Roca! Su obra es perfecta, porque todos sus caminos son justos; Dios de fidelidad y sin injusticia, justo y recto es Ăl.â (LBLA) â HaShem es comparado con una roca. Esto nos habla de firmeza, fuerza, peso, algo inmovible y algo seguro. Cinco veces aparece esta palabra en esta canciĂłn en referencia al Eterno, cf. 4, 15, 18, 30, 31.
El MesĂas YeshĂşa refleja el carĂĄcter del Padre, y por eso tambiĂŠn ĂŠl es llamado roca, cf. IsaĂas 8:14; 28:16; Mateo 16:18; Romanos 9:33; 1 Corintios 10:4 y 1 Pedro 2:8.
SegĂşn la costumbre judĂa, el versĂculo 32:4 es recitado en tiempos de luto, junto con JeremĂas 32:19 que dice:
âgrande en consejo y poderoso en obras, cuyos ojos estĂĄn abiertos sobre todos los caminos de los hijos de los hombres, para dar a cada uno conforme a sus caminos y conforme al fruto de sus obras.â (LBLA revisada)
32:5 âLa corrupciĂłn no es suya, la deficiencia es de sus hijos, una generaciĂłn perversa y torcida.[5]â â La corrupciĂłn no es de HaShem, sino de sus hijos. Hay una discusiĂłn en el Talmud[6]Â si pueden llamarse hijos de HaShem los que son corrompidos.
âuna generaciĂłn perversa y torcidaâ â Nuestro Rabino YeshĂşa estĂĄ citando esta palabra en Mateo 12:39 y 16:4.
32:6 âÂżAsĂ pagĂĄis a HaShem, oh pueblo insensato e ignorante? ÂżNo es Ăl tu padre que te comprĂł? El te hizo y te estableciĂł.â (LBLA revisada) â HaShem sigue llamĂĄndose Padre incluso de los hijos perversos, cf. 32:19.
Si un israelita peca, no deja de ser hijo de HaShem, y siempre hay un camino de vuelta. Pero si sigue en el pecado sin arrepentirse, con el tiempo perderĂĄ el derecho de ser hijo, por haber elegido voluntariamente ese camino.
En Lucas 15:24a estĂĄ escrito:
âporque este hijo mĂo estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado.â (LBLA revisada)
Segunda aliyĂĄ, 32:7-12
7-12 El origen de Israel
32:7 âAcuĂŠrdate de los dĂas de antaĂąo; considera los aĂąos de todas las generaciones. Pregunta a tu padre, y ĂŠl te lo harĂĄ saber; a tus ancianos, y ellos te lo dirĂĄn.â (LBLA) â Este versĂculo, junto con el texto de Deuteronomio 17:8-13, son la base para la autoridad de los jueces dentro del pueblo judĂo. SegĂşn RashĂ, el padre se refiere a los profetas, que son llamados padres, cf. 2 Reyes 2:12; Hechos 3:25. Los ancianos hacen referencia a los sabios, los jajamim.
NajmĂĄnides enseĂąa que este versĂculo habla de dos divisiones del tiempo, los dĂas de antaĂąo y los aĂąos de todas las generaciones. Los dĂas de antaĂąo hacen referencia a los seis dĂas de la creaciĂłn de todas las cosas y los aĂąos de todas las generaciones hacen referencia al tiempo transcurrido desde Adam en adelante. Partiendo desde el primero de los seis dĂas de la creaciĂłn, el universo tiene unos 15 mil millones de aĂąos porque el tiempo de creaciĂłn de cada uno de los seis dĂas se ha dilatado por la expansiĂłn del universo desde entonces. Si calculamos los aĂąos, segĂşn las Escrituras, desde Adam en adelante, estamos acercĂĄndonos al aĂąo 6000. En el aĂąo 6001 empezarĂĄ el reinado mesiĂĄnico.
32:8 âCuando el AltĂsimo dio a las naciones su herencia, cuando separĂł los hijos del hombre, fijĂł los lĂmites de los pueblos segĂşn el nĂşmero de los hijos de Israel.â (LBLA) â Se puede entender este versĂculo como que las fronteras de las naciones fueron fijadas segĂşn la cantidad de israelitas. Las fronteras de Israel han sido reservadas y reveladas a los profetas del pueblo de Israel. TodavĂa Israel no ha llegado a tener todo el territorio que el Eterno ha prometido. Las promesas quedan por cumplirse. Cuando vuelva MashĂaj, Israel tendrĂĄ todo el territorio prometido. Los lĂmites prometidos a Avraham fueron fijados segĂşn la cantidad de hijos de Israel que van a poblar esa ĂĄrea durante el reino mesiĂĄnico, cf. GĂŠnesis 12:7; 15:18-21; Ăxodo 23:31; NĂşmeros 34:2ss; Deuteronomio 11:24; 34:4; 1 Reyes 4:21; 1 CrĂłnicas 9:26; Salmo 80:11; Romanos 4:13.
El MesĂas dijo lo que estĂĄ escrito en Mateo 5:18:
âPorque en verdad os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, no se perderĂĄ ni la letra mĂĄs pequeĂąa ni una tilde de la TorĂĄ hasta que toda se cumpla.â (LBLA revisada)
Esto quiere decir que si Israel no recibe todo el territorio segĂşn las promesas que el Eterno ha dado a Avraham, tanto Ăl como su MashĂaj serĂan mentirosos. ÂżPuede mentir el Eterno? ÂĄNo! Ăl no puede hacer tal cosa, cf. Tito 1:2. Esto quiere decir que durante el reino mesiĂĄnico Israel tendrĂĄ que obtener todo el territorio desde el rĂo de Egipto hasta el rĂo Ăufrates.
32:10 âLo encontrĂł en tierra desierta, en la horrenda soledad de un desierto; lo rodeĂł, le dio discernimiento, lo guardĂł como a la pupila de sus ojos.â (LBLA revisada)Â â Esto es una referencia al momento del encuentro entre Dios e Israel en el desierto, especialmente en Sinai. AllĂ el pueblo fue rodeado y obtuvo conocimiento al entrar en el pacto con el Eterno.
Israel es la pupila del ojo del Eterno de forma alegĂłrica, porque el Eterno no tiene cuerpo. El texto dice literalmente âla pupila de su ojoâ. El ojo es el lugar mĂĄs sensible del cuerpo humano y lo que mĂĄs se protege. Si alguien intenta tocar la pupila del ojo de HaShem serĂĄ severamente castigado.
En el Salmo 17:8 estĂĄ escrito:
âGuĂĄrdame como a la pupila de un ojo; escĂłndeme a la sombra de tus alasâ
En ZacarĂas 2:8-9 estĂĄ escrito:
âPorque asĂ dice HaShem de los ejĂŠrcitos, cuya gloria me ha enviado contra las naciones que os despojaron, porque el que os toca, toca la pupila de su ojo. He aquĂ, alzarĂŠ mi mano contra ellas, y serĂĄn despojo para sus esclavos. Entonces sabrĂŠis que HaShem de los ejĂŠrcitos me ha enviado.â (LBLA revisada)
En Proverbios 7:2 estĂĄ escrito:
âGuarda mis mandamientos y vivirĂĄs, y mi TorĂĄ como la pupila de tus ojos.â (LBLA revisada)
Tercera aliyĂĄ, 32:13-18
13-18 La prosperidad y la apostasĂa de Israel
32:13 âLo hizo cabalgar sobre las alturas de la tierra, y comiĂł el producto del campo; le hizo gustar miel de la peĂąa, y aceite del pedernalâ (LBLA) â AquĂ se refiere a la tierra de Israel que es vista como el lugar mĂĄs alto del planeta. Por eso nunca se habla de bajar a Israel, sino siempre subir. Hacer aliyĂĄ, âsubidaâ, es la forma hebrea de hablar de inmigraciĂłn a la Tierra de Israel.
La miel de la peĂąa puede ser entendida como la dulzura de los frutos que crecen en las rocas. Por causa del sol que calienta la roca los frutos a su lado son mĂĄs dulces que los otros. RashĂ dice que las tortas de higos son comparadas con piedras y la miel de esas tortas es muy dulce.
SegĂşn RashĂ, el aceite del pedernal es una referencia a los olivos de Gush Jalav, una poblaciĂłn en el Galil (Galilea) que, segĂşn el Talmud,[7] producĂa muchĂsimo aceite de oliva.
32:14 âcuajada de vacas y leche de ovejas, con grosura de corderos, y carneros de raza de BashĂĄn y machos cabrĂos, con lo mejor del trigo; y de la sangre de uvas bebiste vino.â (LBLA revisada)Â â Esto habla del tiempo del rey ShelomĂł en adelante, cf. 1 Reyes 5:2-3; AmĂłs 6:4, 6. Los animales de BashĂĄn eran muy gordos. BashĂĄn es el ĂĄrea norte de Israel al oriente del rĂo YardĂŠn.
Este texto nos enseĂąa que el vino simboliza la sangre. Por eso MashĂaj dice que la tercera copa del seder de pesaj representa la renovaciĂłn del pacto con Israel en su sangre que es vertida para el perdĂłn de muchos, cf. Mateo 26:28; Marcos 14:24; Lucas 22:20; 1 Corintios 11:25.
El pacto renovado fue hecho con Israel y YehudĂĄ. AsĂ que el que tiene parte de ese nuevo pacto es parte de Israel. El que no es parte de Israel no tiene parte del nuevo pacto, cf. JeremĂas 31:31, 33.
32:15 âPero YeshurĂşn engordĂł y dio coces (has engordado, estĂĄs cebado y rollizo); entonces abandonĂł a Dios que lo hizo, y menospreciĂł a la Roca de su salvaciĂłnâ â Es la primera vez que aparece la palabra YeshurĂşn en las Escrituras. Es uno de los nombres de Israel. SegĂşn el R. Ibn EzrĂĄ viene de yashar que significa ârectoâ. Hay tres niveles de espiritualidad en los tres nombres de Israel. Yaakov â Israel â YeshurĂşn, cf. 33:26, 28. YeshurĂşn es el mĂĄs alto. El Talmud[8] dice que el nombre YeshurĂşn estaba grabado junto con las doce tribus en las piedras preciosas del pectoral del juicio del Sumo Sacerdote.
Este texto habla de la apostasĂa que hubo en el pueblo al final del reino salomĂłnico y despuĂŠs de la divisiĂłn del reino. La prosperidad causĂł justamente lo que la TorĂĄ habĂa advertido. Se olvidaron de HaShem en sus riquezas y la cosa iba para abajo, tal como lo habĂa dicho HaShem, cf. Deuteronomio 8.
Cuarta aliyĂĄ, 32:19-28
19-26 La pĂŠrdida de Israel despuĂŠs de su apostasĂa
32:20 âEntonces Ăl dijo: “EsconderĂŠ de ellos mi rostro, verĂŠ cuĂĄl serĂĄ su fin; porque son una generaciĂłn perversa, hijos en los cuales no hay fidelidad.â (LBLA)Â â AquĂ empieza el tiempo de pĂŠrdida para Israel. NajmĂĄnides destaca el hecho de que MoshĂŠ hasta ahora ha hablado en su propio nombre, y que a partir de ahora en el Nombre de HaShem.
32:21 âEllos me han provocado a celo con lo que no es Dios; me han irritado con sus Ădolos. Yo, pues, los provocarĂŠ a celos con los que no son un pueblo; los irritarĂŠ con una naciĂłn insensata.â (LBLA) â Como los hijos de Israel tomaron como sus dioses los que no eran Dios, en hebreo lo-El, HaShem toma un pueblo que no es pueblo, (en hebreo lo-am). En el nivel peshat, simple, significa que Israel iba a ser maltratado por un pueblo que no es considerado como pueblo. SegĂşn RashĂ, se refiere a los cashdim (caldeos) y Esav (romanos). Los caldeos son el mismo pueblo que los babilonios, los habitantes de la antigua Caldea, el paĂs de Babilonia. Ese imperio destruyĂł el primer templo. SegĂşn NajmĂĄnides, los cashdim no constituĂan una naciĂłn en su inicio, pero Dios los engrandeciĂł con el fin de utilizarlos para conquistar y dominar el mundo. Gur AryĂŠ dice que los cashdim no tenĂan importancia intrĂnseca porque no poseĂan ni escritura ni lenguaje propios, cf. MeguilĂĄ 13b, y, por ello, no formaban parte de las setenta naciones primordiales. Un descendiente de Esav fundĂł Roma. Los romanos destruyeron el segundo templo. Gur AryĂŠ se basa en el Talmud[9] para decir que Edom tampoco es considerada una naciĂłn en sĂ misma, porque originalmente tampoco tenĂan ni escritura ni lenguaje propios.
En el nivel drash, se puede interpretar el texto de manera que habla de los gentiles que, por causa de la apostasĂa de Israel, recibe la posibilidad de recibir el EspĂritu y convertirse en el pueblo celestial de Dios, oportunidad que es producida por medio de la obra del MesĂas YeshĂşa.
Al igual que el pueblo de Israel considerĂł como sus dioses los que no eran Dios, HaShem considera a los convertidos de entre los gentiles como su propio pueblo. Dentro del Israel espiritual hay un pueblo mĂĄs numeroso que los judĂos, de origen gentil, que ha sido tomado por el Eterno como su pueblo por medio de YeshĂşa HaMashĂaj. Estos gentiles reciben, por adopciĂłn, el derecho legal de ser llamados hijos de Avraham y de Dios y, por lo tanto, tambiĂŠn son herederos de las bendiciones que solamente son para Israel. Esto provoca a los judĂos a ira.
En Oseas 1:10 estĂĄ escrito:
âY el nĂşmero de los hijos de Israel serĂĄ como la arena del mar, que no se puede medir ni contar; y sucederĂĄ que en el lugar donde se les dice: No sois mi pueblo, se les dirĂĄ: Sois hijos del Dios viviente.â (LBLA)
En Romanos 10:19 estĂĄ escrito:
âY aĂąado: ÂżAcaso Israel no sabĂa? En primer lugar, MoshĂŠ dice: YO OS PROVOCARĂ A CELOS CON UN pueblo QUE NO ES PUEBLO; CON UN PUEBLO SIN ENTENDIMIENTO OS PROVOCARĂ A IRA.â (LBLA)
Rabbi ShaĂşl estĂĄ desarrollando este texto en los dos capĂtulos 10 y 11 de la carta a los Romanos. En el final del capĂtulo 11 dice que por la apostasĂa de una parte de Israel, los gentiles llegan a obtener ciertos derechos que pertenecen a los hijos de Israel. Este hecho provoca celos en los judĂos de modo que tambiĂŠn ellos van a querer recibir la salvaciĂłn dada por medio de YeshĂşa HaMashĂaj, primeramente al judĂo y tambiĂŠn al griego.
ÂżCĂłmo los gentiles, convertidos al Dios de Israel por medio de YeshĂşa HaMashĂaj, podrĂĄn provocar a celos aquellos judĂos que no creen que YeshĂşa es el MesĂas, si siguen practicando las costumbres paganas y si no tienen ningĂşn interĂŠs en obtener la herencia que ha sido dada al pueblo judĂo? ÂżCĂłmo los cristianos nacidos de nuevo podrĂĄn provocar a celos a los judĂos, si aborrecen la cultura judĂa, si rechazan la TorĂĄ, el shabat, las fiestas judĂas y la teologĂa hebrea?
Durante mi infancia tenĂamos un perro en casa llamado Zimba. A veces no tenĂa ganas de comer y dejaba su comida en su plato. Pero en el momento cuando el gato se acercaba a esa comida, Zimba de repente tuvo hambre y quiso comerâŚ
No son los judĂos creyentes en YeshĂşa los que tienen el llamado de provocar a los judĂos incrĂŠdulos a celos, sino los gentiles que abrazan el judaĂsmo universal del MesĂas, como estĂĄ escrito en Romanos 11:11, 13-14:
âDigo entonces: ÂżAcaso tropezaron para caer? ÂĄDe ningĂşn modo! Pero por su transgresiĂłn ha venido la salvaciĂłn a los gentiles, para causarles celos… Pero a vosotros hablo, gentiles. Entonces, puesto que yo soy shalĂaj de los gentiles, honro mi ministerio, si en alguna manera puedo causar celos a mis compatriotas y salvar a algunos de ellos.â (LBLA revisada)
32:26 âYo hubiera dicho: ‘Los dispersarĂŠ, borrarĂŠ la memoria de ellos de entre los hombres’â (LBLA revisada) â SegĂşn NajmĂĄnides, las palabras âlos dispersarĂŠâ se refiere a las diez tribus, y la frase âborrarĂŠ la memoria de ellosâ se refiere a las dos tribus. Sin embargo, por los mĂŠritos de los padres los judĂos fueron salvos de esta sentencia.
32:27 âsi no fuera porque la furia del enemigo se ha acumulado, no sea que falseen sus adversarios, no sea que dijeran: ‘Nuestra mano ha triunfado, y no es HaShem el que ha hecho todo esto.’â (LBLA revisada) â Si no hubiera sido por el honor del Nombre de HaShem y por los mĂŠritos de los padres, las doce tribus hubieran sido eliminadas. Pero HaShem tiene un plan de restauraciĂłn, no sĂłlo para los judĂos, sino para todas las doce tribus.
El mismo argumento, de lo que dirĂĄn los enemigos contra el Eterno, fue usado por MoshĂŠ en su intercesiĂłn a favor de Israel, cf. NĂşmeros 14:13-16; Deuteronomio 9:28; Ezequiel 36:20-23.
32:28 âPorque son una naciĂłn privada de consejo, y no hay en ellos discernimiento.â (LBLA revisada)Â â Los hijos de Israel son llamados ignorantes cuando no toman en serio la TorĂĄ para ponerla en prĂĄctica. La gran mayorĂa de los hijos de Israel no ha hecho caso de la TorĂĄ a lo largo de la historia, y por eso es un pueblo privado de consejo y falto de discernimiento.
El hecho de que la mayorĂa de los judĂos rechazĂł al MesĂas cuando vino la primera vez, es otra muestra de la gran ignorancia de las profecĂas mesiĂĄnicas que hay en la TorĂĄ, que apuntan claramente hacia YeshĂşa.
Quinta aliyĂĄ, 32:29-39
29-39 La dispersiĂłn de Israel entre las naciones
32:35 âMĂa es la venganza y la retribuciĂłn; a su tiempo el pie de ellos resbalarĂĄ, porque el dĂa de su calamidad estĂĄ cerca, ya se apresura lo que les estĂĄ preparado.â (LBLA)Â â La venganza es solamente de Dios. NingĂşn hombre puede tomar la venganza en sus propias manos. El hombre puede defenderse pero nunca vengarse. Si una persona quiere vengarse privadamente estĂĄ tomando el lugar de Dios. Ăl tiene el papel de juzgar a cada uno segĂşn sus obras. Ăl es el Juez Supremo, no nosotros.
Sin embargo, Ăl puede delegar su autoridad a los hombres, de manera que las autoridades tienen, no solamente el derecho, sino tambiĂŠn la obligaciĂłn de ejecutar la venganza de Dios sobre los pecadores, cuando sus pecados estĂĄn al descubierto.
En Romanos 12:19-21 estĂĄ escrito:
âAmados, nunca os venguĂŠis vosotros mismos, sino dad lugar a la ira, porque escrito estĂĄ: MIA ES LA VENGANZA, YO PAGARĂ, dice el SeĂąor. PERO SI TU ENEMIGO TIENE HAMBRE, DALE DE COMER; Y SI TIENE SED, DALE DE BEBER, PORQUE HACIENDO ESTO, CARBONES ENCENDIDOS AMONTONARĂS SOBRE SU CABEZA. No seas vencido por el mal, sino vence con el bien el mal.â (LBLA)
En Hebreos 10:28-31 estĂĄ escrito:
âCualquiera que viola la TorĂĄ de MoshĂŠ muere sin misericordia por el testimonio de dos o tres testigos. ÂżCuĂĄnto mayor castigo pensĂĄis que merecerĂĄ el que ha hollado bajo sus pies al Hijo de Dios, y ha tenido por inmunda la sangre del pacto por la cual fue santificado, y ha ultrajado al EspĂritu de gracia? Pues conocemos al que dijo: MIA ES LA VENGANZA, YO PAGARĂ. Y otra vez: HASHEM JUZGARĂ A SU PUEBLO. ÂĄHorrenda cosa es caer en las manos del Dios vivo!â
32:36 âCuando HaShem juzgarĂĄ a su pueblo Ăl reconsiderarĂĄ acerca de sus siervos, cuando vea que la mano del enemigo progresa, y que nadie dirija ni ayude.â (LBLA revisada)Â â A partir de este momento empieza el proceso de restauraciĂłn del pueblo agobiado por los enemigos y las maldiciones por causa de sus pecados. Cuando el poder de Israel sea destruido, vendrĂĄ el MesĂas como un guerrero libertador, cf. Daniel 12:7.
32:38a âlos que comĂan la grosura de sus sacrificios, y bebĂan el vino de su libaciĂłnâ (LBLA) â Este versĂculo es la base para la prohibiciĂłn talmĂşdica[10] de usar el vino de los gentiles para el culto, e incluso la prohibiciĂłn rabĂnica de beber vino producido o manejado por los gentiles.
32:39b âYo hago morir y hago vivirâ (LBLA) â AquĂ hay otro texto en la TorĂĄ de MoshĂŠ que habla de la resurrecciĂłn de los muertos. Otros textos del Tanaj que hablan de la resurrecciĂłn son GĂŠnesis 22:5; Ăxodo 3:15 (ver Mateo 22:31-32); Deuteronomio 31:16; 1 Samuel 2:6; 2 Reyes 5:7; Salmo 16:10; 49:15; 73:24; Job 19:25-27; IsaĂas 25:8; 26:19; 53:12; Daniel 12:2; Ezequiel 37:1-14; Oseas 6:2; 13:14.
Este contexto nos enseĂąa que la resurrecciĂłn va a suceder en relaciĂłn con la Ăşltima guerra contra Israel. El MesĂas, que ejecuta la venganza del Eterno, vendrĂĄ en las nubes del cielo y en ese momento los muertos en el MesĂas serĂĄn levantados y junto con los que viven creyendo en ĂŠl, serĂĄn arrebatados al aire, (no al cielo), despuĂŠs de haber sido investidos con cuerpos eternos que serĂĄn semejantes al cuerpo de resurrecciĂłn del MesĂas YeshĂşa. Entonces serĂĄn juzgados segĂşn sus obras. DespuĂŠs bajarĂĄn, junto con el MesĂas, para hacer guerra contra todos los ejĂŠrcitos multinacionales que se hayan levantado contra Yerushalayim. De esa guerra se habla en los versĂculos siguientes.
Sexta aliyå, 32:40-43
40-43 La salvaciĂłn de Israel y su influencia mundial
32:40-43 âCiertamente, alzo a los cielos mi mano, y digo: “Como que vivo yo para siempre, cuando afile mi espada flameante y mi mano empuĂąe la justicia, me vengarĂŠ de mis adversarios y darĂŠ el pago a los que me aborrecen. EmbriagarĂŠ mis saetas con sangre, y mi espada se hartarĂĄ de carne, a causa de la sangre de muertos y cautivos, a causa de la primera de las brechas del enemigo.â Regocijaos, naciones, con su pueblo, porque Ăl vengarĂĄ la sangre de sus siervos; traerĂĄ venganza sobre sus adversarios, y harĂĄ expiaciĂłn por su tierra, su pueblo.â (LBLA revisada)Â â AquĂ se habla de la Ăşltima guerra contra Israel antes de la segunda venida del MesĂas YeshĂşa. Este texto concuerda con ZacarĂas 14 y RevelaciĂłn 19.
En ZacarĂas 14:1-15 estĂĄ escrito:
âHe aquĂ, viene el dĂa de HaShem cuando serĂĄn repartidos tus despojos en medio de ti. Y yo reunirĂŠ a todas las naciones en batalla contra Yerushalayim; y serĂĄ tomada la ciudad y serĂĄn saqueadas las casas y violadas las mujeres; la mitad de la ciudad serĂĄ desterrada, pero el resto del pueblo no serĂĄ cortado de la ciudad. Entonces saldrĂĄ HaShem y pelearĂĄ contra aquellas naciones, como cuando Ăl peleĂł el dĂa de la batalla. Sus pies se posarĂĄn aquel dĂa en el monte de los Olivos, que estĂĄ frente a Yerushalayim, al oriente; y el monte de los Olivos se hendirĂĄ por el medio, de oriente a occidente, formando un enorme valle, y una mitad del monte se apartarĂĄ hacia el norte y la otra mitad hacia el sur. Y huirĂŠis al valle de mis montes, porque el valle de los montes llegarĂĄ hasta Atsel; huirĂŠis tal como huisteis a causa del terremoto en los dĂas de UziĂĄ, rey de YehudĂĄ. Y vendrĂĄ HaShem mi Dios, y todos los santos con Ăl. Y sucederĂĄ que en aquel dĂa no habrĂĄ luz; las luminarias se oscurecerĂĄn. SerĂĄ un dĂa Ăşnico, conocido sĂłlo de HaShem, ni dĂa ni noche; y sucederĂĄ que a la hora de la tarde habrĂĄ luz. En aquel dĂa sucederĂĄ que brotarĂĄn aguas vivas de Yerushalayim, una mitad hacia el mar oriental y la otra mitad hacia el mar occidental, serĂĄ lo mismo en verano que en invierno. Y HaShem serĂĄ rey sobre toda la tierra; aquel dĂa HaShem serĂĄ uno, y uno su nombre. Toda la tierra se volverĂĄ como una llanura desde Gueva hasta RimĂłn, al sur de Yerushalayim; pero ĂŠsta se levantarĂĄ y serĂĄ habitada en su lugar desde la puerta de BinyamĂn hasta el lugar de la puerta Primera, hasta la puerta del Angulo, y desde la torre de Jananel hasta los lagares del rey. Y habitarĂĄn en ella y no habrĂĄ mĂĄs maldiciĂłn; y Yerushalayim habitarĂĄ en seguridad.
Esta serĂĄ la plaga con que HaShem herirĂĄ a todos los pueblos que han hecho guerra contra Yerushalayim: se pudrirĂĄ su carne estando ellos aĂşn de pie, y se pudrirĂĄn sus ojos en sus cuencas, y su lengua se pudrirĂĄ en su boca. Y sucederĂĄ aquel dĂa que habrĂĄ entre ellos un gran pĂĄnico de HaShem; y cada uno agarrarĂĄ la mano de su prĂłjimo, y levantarĂĄ su mano contra la mano de su prĂłjimo. TambiĂŠn YehudĂĄ pelearĂĄ en Yerushalayim; y se amontonarĂĄn las riquezas de todas las naciones circunvecinas: oro, plata y vestidos en gran abundancia. Como aquella plaga asĂ serĂĄ la plaga del caballo, del mulo, del camello, del asno y de todos los animales que haya en aquellos campamentos.â (LBLA revisada)
En RevelaciĂłn 19:11-21 estĂĄ escrito:
âY vi el cielo abierto, y he aquĂ, un caballo blanco; el que lo montaba se llama Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y hace la guerra. Sus ojos son una llama de fuego, y sobre su cabeza hay muchas diademas, y tiene un nombre escrito que nadie conoce sino ĂŠl. Y estĂĄ vestido de un manto empapado en sangre, y su nombre es: El Verbo de Dios. Y los ejĂŠrcitos que estĂĄn en los cielos, vestidos de lino fino, blanco y limpio, le seguĂan sobre caballos blancos. De su boca sale una espada afilada para herir con ella a las naciones, y las regirĂĄ con vara de hierro; y ĂŠl pisa el lagar del vino del furor de la ira de Dios Todopoderoso. Y en su manto y en su muslo tiene un nombre escrito: REY DE REYES Y SEĂOR DE SEĂORES. Y vi a un ĂĄngel que estaba de pie en el sol. Y clamĂł a gran voz, diciendo a todas las aves que vuelan en medio del cielo: Venid, congregaos para la gran cena de Dios, para que comĂĄis carne de reyes, carne de comandantes y carne de poderosos, carne de caballos y de sus jinetes, y carne de todos los hombres, libres y esclavos, pequeĂąos y grandes.
Entonces vi a la bestia, a los reyes de la tierra y a sus ejĂŠrcitos reunidos para hacer guerra contra el que iba montado en el caballo y contra su ejĂŠrcito. Y la bestia fue apresada, y con ella el falso profeta que hacĂa seĂąales en su presencia, con las cuales engaĂąaba a los que habĂan recibido la marca de la bestia y a los que adoraban su imagen; los dos fueron arrojados vivos al lago de fuego que arde con azufre. Y los demĂĄs fueron muertos con la espada que salĂa de la boca del que montaba el caballo, y todas las aves se saciaron de sus carnes.â (LBLA)
DespuĂŠs de esta guerra vendrĂĄ el reino mesiĂĄnico con mil aĂąos de paz sobre toda la tierra.
En ZacarĂas 14:16-21 estĂĄ escrito:
âY sucederĂĄ que todo sobreviviente de todas las naciones que fueron contra Yerushalayim subirĂĄn de aĂąo en aĂąo para adorar al Rey, HaShem de los ejĂŠrcitos, y para celebrar la fiesta de las CabaĂąas. Y sucederĂĄ que los de las familias de la tierra que no suban a Yerushalayim para adorar al Rey, HaShem de los ejĂŠrcitos, no recibirĂĄn lluvia sobre ellos. Y si la familia de Egipto no sube ni viene, entonces sobre ellos no habrĂĄ lluvia; serĂĄ la plaga con la cual HaShem herirĂĄ a las naciones que no suban a celebrar la fiesta de las CabaĂąas. Este serĂĄ el castigo de Egipto y el castigo de todas las naciones que no suban a celebrar la fiesta de las CabaĂąas. En aquel dĂa estarĂĄ grabado en los cascabeles de los caballos: SANTIDAD A HASHEM. Y serĂĄn las ollas en la casa de HaShem como los tazones delante del altar. Y toda olla en Yerushalayim y en YehudĂĄ serĂĄ consagrada a HaShem de los ejĂŠrcitos; todos los que ofrezcan sacrificios vendrĂĄn y tomarĂĄn de ellas y en ellas cocerĂĄn; y no habrĂĄ mĂĄs mercader en la casa de HaShem de los ejĂŠrcitos en aquel dĂa.â (LBLA revisada)
En RevelaciĂłn 20:1-6 estĂĄ escrito:
âY vi a un ĂĄngel que descendĂa del cielo, con la llave del abismo y una gran cadena en su mano. PrendiĂł al dragĂłn, la serpiente antigua, que es el diablo y satanĂĄs, y lo atĂł por mil aĂąos; y lo arrojĂł al abismo, y lo cerrĂł y lo sellĂł sobre ĂŠl, para que no engaĂąara mĂĄs a las naciones, hasta que se cumplieran los mil aĂąos; despuĂŠs de esto debe ser desatado por un poco de tiempo.
TambiĂŠn vi tronos, y se sentaron sobre ellos, y se les concediĂł autoridad para juzgar. Y vi las almas de los que habĂan sido decapitados por causa del testimonio de YeshĂşa y de la palabra de Dios, y a los que no habĂan adorado a la bestia ni a su imagen, ni habĂan recibido la marca sobre su frente ni sobre su mano; y volvieron a la vida y reinaron con el MesĂas por mil aĂąos.
Los demĂĄs muertos no volvieron a la vida hasta que se cumplieron los mil aĂąos. Esta es la primera resurrecciĂłn. Dichoso y santo es el que tiene parte en la primera resurrecciĂłn; la muerte segunda no tiene poder sobre ĂŠstos sino que serĂĄn sacerdotes de Dios y del MesĂas, y reinarĂĄn con ĂŠl por mil aĂąos.â (LBLA revisada)
SĂŠptima aliyĂĄ, 32:44-52
32:47 âPorque no es cosa vana para vosotros; ciertamente es vuestra vida. Por esta palabra prolongarĂŠis vuestros dĂas en la tierra adonde vosotros vais, cruzando el YardĂŠn a fin de poseerla.â (LBLA revisada)Â â Ninguna parte de la TorĂĄ carece de significado. Todo es importante. Al poner en prĂĄctica la TorĂĄ hay una vida bendecida en este mundo y vida eterna en el mundo por venir. La TorĂĄ de MoshĂŠ habla de YeshĂşa y da testimonio de su obra redentora. El que hace caso a MoshĂŠ creerĂĄ en YeshĂşa, porque de ĂŠl escribiĂł, como estĂĄ dicho en Juan 5:46-47:
âPorque si creyerais a MoshĂŠ, me creerĂais a mĂ, porque de mĂ escribiĂł ĂŠl. Pero si no creĂŠis sus escritos, ÂżcĂłmo creerĂŠis mis palabras?â
El judĂo que no cree en YeshĂşa es porque no le cree a MoshĂŠ.
32:52 âPor tanto, sĂłlo de lejos verĂĄs la tierra, pero allĂ no entrarĂĄs, a la tierra que doy a los hijos de Israel.â (LBLA revisada)Â â MoshĂŠ implorĂł tanto a HaShem que le quitara la sentencia y le dejara entrar en la tierra. Pero HaShem dijo que no. ÂżCuĂĄl fue el motivo del Eterno para no permitir que MoshĂŠ cruzara un pequeĂąo rĂo para pisar la tierra prometida? El motivo no fue solamente enseĂąar la gravedad de los pecados de los lĂderes. No fue solamente mostrar la firmeza en sus decisiones. Hay un motivo mucho mĂĄs importante detrĂĄs de esa decisiĂłn. ÂżCuĂĄl es?
El gran profeta MoshĂŠ, el que transmitiĂł la TorĂĄ al mundo, el que hizo grandes milagros y hablĂł con el Eterno cara a cara. Este hombre, que habĂa alcanzado el mayor nivel de santidad que un hombre puede tener, no tenĂa suficientes mĂŠritos ni para pasar ĂŠl mismo, ni para hacer pasar el pueblo a la tierra prometida. SĂłlo un hombre podĂa hacer que el pueblo pasara, su nombre fue YehoshĂşa. La forma abreviada de ese nombre es YeshĂşa. Esto nos enseĂąa que la obra de MoshĂŠ no fue completa. La TorĂĄ de MoshĂŠ no es suficiente para que el hombre pueda pasar de la muerte a la vida. Ni MoshĂŠ mismo pudo pasar a la tierra, por causa de sus pecados. SĂłlo uno puede llevarnos al olam habĂĄ, el siglo venidero. Su nombre es YeshĂşa. Por medio de MoshĂŠ, HaShem designĂł a YehoshĂşa como el que iba a ser el lĂder para hacer pasar el pueblo de un mundo a otro. Por lo tanto, el que hace caso a MoshĂŠ sigue a YeshĂşa y tendrĂĄ la entrada asegurada en el mundo venidero, como estĂĄ escrito en Juan 11:25:
âYeshĂşa le dijo: Yo soy la resurrecciĂłn y la vida; el que cree en mĂ, aunque muera, vivirĂĄâ
[1]Â Â Â Â Â Â Â Leyes prĂĄcticas de aplicaciĂłn de la TorĂĄ Escrita en las diferentes situaciones del pueblo de Israel a lo largo de la historia, tambiĂŠn llamada torĂĄ oral.
[2]Â Â Â Â Â Â Â KidushĂn 71a.
[3]Â Â Â Â Â Â Â La Voz de la TorĂĄ.
[4]Â Â Â Â Â Â Â Berajot 21a.
[5]Â Â Â Â Â Â Â AsĂ entiende RashĂ y el Targum de OnkelĂłs el texto hebreo.
[6]Â Â Â Â Â Â Â KidushĂn 36a.
[7]Â Â Â Â Â Â Â Menajot 85b.
[8]Â Â Â Â Â Â Â Yoma 73b.
[9]Â Â Â Â Â Â Â AvodĂĄ ZarĂĄ 10a.
[10]Â Â Â Â Â Â AvodĂĄ ZarĂĄ 29b.
Shema Israel Communities, is a network of Communities (synagogues) of messianic conviction, established in several in some States of the USA, and in some cities of some countries such as USA, Mexico, Guatemala, Costa Rica, Colombia , Brazil, and in Spain, in the city of Malaga; The Shema Israel Synagogues are established with a vision to house the Bney Anusim and those who identify with Israel and the Jewish People. Each community is deeply identified with the Jewish Messiah Yeshua haMashiach and the Apostolic Writings; A network of congregations observing the Torah, the Feasts of the Eternal and of course the Shabath and the Kasherut.